El precio de los suministros de hogar continua siendo una gran preocupación entre los españoles. Y lo será, más aun, con la subida del IVA de la luz de 2024. O, mejor dicho, con las dos subidas que ya ha sufrido en este año.
El IVA de la luz pasó a ser del 10% en junio de 2021. Se pretendía así paliar los daños económicos de la Covid-19. Y, al poco de comenzar el 2022, el conflicto en Ucrania agravó la crisis energética y ese impuesto fue reducido al 5%. En ese momento había una crisis de escasez de energía a nivel global y, de esta manera, se facilitaba el acceso tras una fuerte subida del precio tanto de la electricidad como del gas.
El IVA de la electricidad
El IVA es el Impuesto sobre el Valor Añadido que ha de pagarse por cualquier producto o servicio que se adquiere. Y los suministros básicos, como es la luz, es uno de esos servicios. Éste se aplica a varios conceptos como los peajes, el consumo de energía, el alquiler del contador o lo derechos de acometida. En este caso el cambio afectará a los tres primeros, ya que el resto siempre se ha mantenido en un 21%.
¿Cuándo sube el IVA de la luz?
Desde el ejecutivo ya decidieron que, superada esa crisis energética y económica, ya era el momento de volver a la normalidad, y que a ésta se llegaría de una manera moderada. El pasado 1 de enero, el IVA se incrementó al 10%. Y desde el 1 de marzo de 2024, dado que el precio de la luz se encuentra por debajo de los 45 €/MWh, el gravamen ya ha vuelto a ser del 21%. Y, aunque ese precio se valora como razonable, la subida del IVA de la luz provocará que los usuarios vean incrementado el coste de sus facturas de manera considerable.
¿Cómo paliar la subida del IVA de la luz?
Existen diferentes maneras de reducir el coste de las facturas de luz. Y, entre ellas, podemos destacar:
- Un consumo responsable
- Alternativas en el origen de la energía
Y, entre esas alternativas, son protagonistas las energías renovables. Así, la instalación de placas solares es una fantástica solución. Te permitirá realizar un menor, o nulo, consumo de la red convencional gracias a la utilización de la electricidad generada a través de las placas solares. Y además, es posible aprovechar económicamente la energía generada y no consumida con la compensación de excedentes.
