Las instalaciones de placas solares están diseñadas para tener un buen rendimiento durante varias décadas. Para que así sea conviene seguir unas sencillas pautas de mantenimiento de placas solares. Dependiendo del tipo de instalación y de su localización, éstas podrían variar.
En una instalación de placas solares convencional no existen componentes móviles ni mecanismos complejos de revisar. No será necesario tampoco lubricar ni engrasar. Salvo que estemos ante una instalación con seguidores (ejes giratorios).
Por suerte, el mantenimiento de placas solares está al alcance de la gran mayoría de propietarios, ya que es fácil de realizar y no implican un coste. Con ello será posible alargar la vida útil de las placas solares, aun aceptando que están expuestas a los antojos de la naturaleza y del paso del tiempo.
Motivos para hacer el mantenimiento de las placas solares
Un correcto mantenimiento de placas solares supone unos beneficios que van más allá de aquellos cortoplacistas. Vamos a verlos.
Rendimiento
Para que se produzca un aprovechamiento máximo de la energía solar es necesario que las condiciones sean ideales. En el rendimiento de las placas solares influyen muchos factores, y uno de ellos es su mantenimiento.
Conservación
Unas sencillas medidas preventivas para evitar problemas más graves, como la aparición de hot spot o puntos calientes en las placas solares. Y, por supuesto, supondrán el alargamiento de la vida útil de las placas solares.
Seguridad
Algunos de esos problemas graves se relacionan con la integridad de las personas alrededor. Por suerte, las instalaciones de placas solares ofrecen garantías en este aspecto, incluso para casos donde el mantenimiento no es exhaustivo.
Aceleración de amortización de las placas solares
Generalmente habla de 7 años en cuanto al tiempo de amortización de placas solares. Esto puede incluso mejorarse llevando a cabo ciertos cuidados, y así hacer que el rendimiento de los paneles solares sea siempre el máximo posible.
¿Qué mantenimiento necesitan las placas solares?
Como venimos comentando, mantener en buen estado los paneles solares es sencillo. Además, la frecuencia de mantenimiento de las placas solares no será demasiado exigente en muchos casos. Expertos comentan que hay que realizarlo tres o cuatro veces al año. O, lo que es lo mismo, cada tres o cuatro meses. Principalmente hablaríamos de las tareas de limpieza. El resto podría esperar más, aunque conviene realizar todas aprovechando la ocasión. No obstante, los ejercicios de cuidado y prevención nunca deberían esperar más de un año.
El mantenimiento depende de dónde se encuentren estas instalaciones fotovoltaicas. En las zonas desérticas habrá que prestar mayor atención al polvo que se acumula; en lugares con precipitaciones abundantes, la lluvia ayudará a su limpieza; cerca del mar, la humedad obligará a atender las posibles oxidaciones; y en zonas con pájaros y árboles podrían sufrir mayor suciedad.
Por suerte, las instalaciones solares están preparados para estar a la intemperie y aguantar las condiciones exteriores. Algo que no exime de realizar las siguientes tareas.
Comprobar instalación
Las conexiones eléctricas deben ser las correctas y estar bien fijadas, y los cables estar en buen estado y sin deterioro. La estructura ha de tener una óptima posición del atornillado y de los anclajes. Y no deben existir oxidaciones. Además, es necesario comprobar que no haya partes rotas o con desperfectos.
Limpieza de placas solares
Esta parte es fundamental, y más adelante detallaremos cómo llevarlo a cabo. Repercutirá tanto en el rendimiento como en su vida útil. Se calcula que el rendimiento de unas placas solares sucias puede ser de un 8% inferior a las de unas limpias. Hay que quitar el polvo, los deshechos de animales y vegetales, y cualquier elemento que se apoye en las placas y que no permita recibir la máxima radiación solar posible en los paneles fotovoltaicos.
Revisión de sombras
Cuando decidimos poner placas solares en casa, se suele plasmar con una instalación óptima, teniendo en cuenta todos los detalles. Por supuesto, incluidas las posibles sobras. Con el paso del tiempo, es posible que otros elementos puedan interferir, principalmente vegetación. Hay que prestar atención para, siempre que sea posible, retirarlos.
Cómo hacer limpieza de las placas solares
Como ya hemos comentado, la limpieza es un punto clave en el mantenimiento de las placas solares. Por suerte es muy sencilla de llevar a cabo.
- La limpieza de las placas solares debe hacerse con agua a temperatura ambiente, frotando suavemente con alguna esponja, paño o similar.
- El objeto de limpieza pudiera ir conectado a un palo para facilitar la tarea.
- Se deberá empezar por las placas solares de la parte superior. De la manera contraria, el agua y la suciedad pasaría hacia la zona inferior ya limpiada. Así, además, podremos evitar mojar nuestra ropa.
- Una vez esté eliminada la suciedad, se secarán los paneles para evitar la formación de manchas.
- Conviene no realizar la limpieza en horas de temperaturas extremas para evitar el choque térmico en el panel y, así, posibles microfracturas. Tampoco en días de demasiado viento, ya que podríamos favorecer la adhesión de suciedad al panel durante la limpieza con agua.
- Es importante no rayar los paneles o dañarlos de otro modo. Por ello también se recomienda que esa esponja o similar sea suave y que el agua sea lo más limpia y desmineralizada posible, y emplearla sin presión. Así como no utilizar productos de limpieza especiales, con propiedades agresivas. Bastará con jabón neutro o, incluso en muchas ocasiones, sólo con agua.
Precauciones en el mantenimiento de las placas solares
Hay que prestar ciertos cuidados a la hora de realizar un mantenimiento. Los principales son los siguientes:
- No pisar ni caminar sobre los paneles: hay riesgo de caída y de fractura de las placas solares.
- Utilizar guantes: estamos hablando de una instalación eléctrica, y todos los aislantes serán bienvenidos para tratar con cables y otros elementos con tensión.
- Protegerse con casco: por si existiera la posibilidad de choque o desprendimiento de algún elemento.
- Usar arnés: si las placas se realizan en altura y/o sobre tejado, siempre puede existir riesgo de caída.
- Mantener metro y medio a la orilla del vacío: otra media en cuanto a placas solares en altura.
Ahora ya sabemos más sobre qué mantenimiento necesitan las placas solares. Una serie de sencillos cuidados que mejorar su rendimiento y su vida útil. No obstante, siempre convendrá seguir los consejos que indiquen las empresas instaladoras de placas solares.